jueves, 21 de mayo de 2009

Historias….

Hace unos días me llamaron por teléfono a la dirección escolar, pidiéndome que fuera al siguiente día a la reunión de Escuelas de Calidad.

Pues ya, al sig. Día suspendo mis labores para asistir a dicha reunión, los niños: “¿No, nos va a dar?” Yo: Tengo que ir a una reunión que le corresponde al director y ya saben, su hijo esta malo en Jalisco, así que tengo que ir.

Ya estando en la reunión, esta es interrumpida por una llamada telefónica:

-Héctor, te hablan por teléfono –

Yo: ¿Quién?

- Es Trino-

Yo: Ok.

Yo: ¿Diga…?

Director: Mira Héctor si me quieres ayudar, ayúdame bien… yo no puedo ir ahorita, necesito que tu lo hagas bla, bla, bla, bla…

Yo: Maestro, ya hable con la encargada de escuelas de calidad, dice que aún tenemos tooodo junio, así que usted bien alcanza a venir y solucionar todo.

Él: A mí me gustaría que ya estuviera todo listo, mira yo nada más voy y firmo y ya tú te encargas de lo demás.

Yo: Ja, ja…..

Él: Yo, ya no quería ir este fin de semana, pero… me va a tocar ir.

Y yo: ja, ja….

Él: El sábado voy, mientras vean tú y la maestra Tania, las cosas que van a comprar.

Yo: Ok, si eso ya se lo dije a la maestra desde el otro día.

Esto entre algunas otras cosas en la conversación.

Al llegar a la escuela como a las 12 y sin haber almorzado, me dicen: En cuanto se fue usted, que le llama el director y le dijo: Que si le iba hacer el favor, se lo hiciera completo.

Realmente esa no es la actitud, creo yo, tanto mis compañeros de la institución como la maestra María Luisa, La Sra. Hortensia y Yo estamos haciendo lo posible por realizar lo acordado para la escuela.

Sin embargo para que nos salga este señor con esos comentarios… En fin, trato de entender su desesperación. (Por que aaaaclaro, de la situación de su hijo, nadie reprocha nada)

De por si el otro día…. Después de andar en varios bancos de la ciudad, en la supervisión, en el salón recepcional de un hotel, (A este lugar teníamos que entregar la ficha de depósito) donde por cierto estaban en pleno almuerzo y yo con un haaambre. etc. tratando de cambiar un cheque de la presidencia municipal a la escuela, fue todo un caos, porque teníamos tiempo límite, por que el titular no estaba, porque tanto la maestra María Luisa como yo, suspendimos labores por andar haciendo este papeleo. En mi momento de desesperación dije, hmm mejor le llamo al director, lo hago y le comento: Sabe, no podemos, creo que le va a tocar venir… Porque esto y lu otro y bla, bla, bla… Y que me responde: “Hmmm, hmm, (con voz de semi despierto) mira…. Mejor llámame a la casa, al número de la casa de acá, porque me vas a terminar el saldo.”

Y yo: WTF?

¿Y en donde queda mi crédito? (Digo, por que llamaba de mi celular, celular que él tiene registrado y sino, bien sabia que no era el número de la escuela). Este tipo de papeleo no es mi obligación, tengo más de 85 minutos tratando de solucionar esto, como para esperar una respuesta así.  realmente WTF?

Mejor le dije: Ahorita veo y colgué. Quería sentarme para reírme de lo compasivo (Aquí originalmente había puesto pende**) que estaba siendo yo por soportar estas cosas (Y también la maestra que me acompañaba). Pero… Claro mi ética no me iba a dejar aventar todo a la fregada, así que seguimos intentando, hasta que por ahí surgió un contacto que nos ayudo a conseguir cambiar el cheque. (Ya que traía un texto en la cabecera: Cheque NO negociable, y cuando los cheques dicen esto no se puede cambiar, ni endosar ni nada a menos que no sea el titular).

En fin… ¿Quién soy yo para ventilar este tipo de cosas?, Hoy lamentablemente soy solamente “El que las vive” y esta es una breve historia de benevolencia de un químico pagano.

Bueno, también no es para tanto, pero en momentos de ajetreo, no es nada agradable. Créanmelo.

No hay comentarios.: