De la misma tela, con la misma tijera.

La capacitación intensiva del inglés (PIM) que se realizó la semana pasada en el Hotel Villas del Sol, fue demasiado fructífera, logre aprender algunos tips y algo de teoría en la enseñanza de la segunda lengua (Como cada vez que las hay, pero nunca habíamos tenido una de toda la semana).

Pero antes de eso dejen que les cuente que el pasado viernes 19 de marzo lleve a 6 niños de mi escuela a participar en el evento: LET’S PLAY del PIM (Programa de Inglés en Michoacán) a participar a Morelia. Ahí todos amontonados se fueron en mi coche, pero no iba acuartar a mi escuela para la cual laboro de no participar en dicho suceso.

Al estar allá, ellos gracias a sus capacidades desarrolladas en la dominación de la segunda se ganaron 21 libritos (lecturas de cuentos) en inglés, demasiados creo yo, para la cantidad de niños que iban de mi escuela, ya que hubo alumnos de otras que solo consiguieron un libro por niño.

Ese día le pregunte a la maestra encargada del programa:

-Maestra, ¿Hay algún tipo de descuento en el hospedaje del hotel para el diplomado de la siguiente semana?-

-Ella: No, parece que no, aún nada, el lunes te aviso, esperemos que si consiga algo… Hay elementos que realmente se lo merecen y otros no. Claro… tu eres de los que si lo ha cosechado.-

-Yo: Ok, gracias, de favor mantengame informado.-

El lunes se llegó… Listo ya en el curso, la maestra me llama en medio de la capacitación a salir un momento del lugar. Y me dice:

- Héctor… Buenas noticias, si conseguí el hospedaje, toda la semana, no alimentos, pero si el 100% de la habitación para unos cuantos. Entre ellos tu claro.-

-Yo: ¡Yuhu!-

Enseguida entable de nuevo conversación con un compañero (René) que ya conocía de tiempo atrás y que mejor que hacerlo ahora, que compartiríamos quizás la misma habitación.

Todo trascurrió con normalidad en la semana, aún que un poco aterrado… de-repente me asomaba por la ventana y veía todo el convoy de patrullas y demás equipos móviles de la PFP. (Para los que no saben, ahí en ese hotel hace unos meses hubo balacera, bombazos, y ahí se sigue quedando la PFP). El hotel está atascado de policías y claro causaba un poco de terror ver a tanto tipo armado.

Pero bueno este post es para contarles las malas, malas noches que pasé en dicho lugar.
Debo señalar que en un cuarto estaban dos camas matrimoniales, en una estaba mi compañero de cuarto René Luna y en la otra yo.

La primera noche a eso de las 3 am, una mujer comenzó a quejarse del placer que tenía con su cónyuge. Yo me tape con la almohada para poder dormir y no desconcentrar mi sueño ya que mi sueño era por millas mucho mejor que escuchar los quejidos de esta chica. Mi sueño era tan importante porque en él me hacía cargo de la humanidad (En todos los sentidos posibles). Sin embargo los sonidos de la chica, que parecía estaba en un cuarto cercano, muy cercano echaban a perder mis planes.

La segunda noche, todo iba bien y solo me decía a mí mismo: Ojala que esta noche no se escuchen los quejidos.

Pero…

Mi compañero de cuarto (René) comenzó con unos tremendos ronquidos, devastadores…
Sentía el ensordecedor y molesto escándalo que emergía de su ser en mis afables oídos. Así que opte por grabar sus ronquidos, para que al siguiente día me creyera, cuando le dijera que ronca como un tráiler.

Esa noche yo me retorcía por toda la cama, porque el sonido era molesto… Eso claro me estaba causando insomnio. Yo hacía ruidos algo fuertes de tosidos ( Coof, coof..eem, cooooof, coof,) para que así se despertara y se acomodara o algo pasase a mi favor.

Nada, el chico estaba plenamente dormido, después de tanto intento fallido y de que finalmente me canse de tanto patalear en la cama, termine dormido por el cansancio.

Al siguiente día le dije:

-Oye gallo roncas demasiado, escúchate…
Y el solo se rió, diciendo:
-¿Apoco si? ¿si soy yo ese?-

¡Cielos! Me tocó darle una explicación del porqué una persona roncaba…

Y le dije, deberías cambiarte al cuarto de Noe, para que él se quede aquí y tú tengas el mini cuarto solo para ti. Así yo podré dormir.

¿Y qué creen que me respondió?

El muy recanijo me respondió: No, yo no…Yo Porque…

A lo cual solo dije: Ok. (Quizás la siguiente noche no pase igual, en la primera roncó pero no tan fuerte).

Ese día me invitó a “Vida Abundante” (centro religioso del cristianismo, muy famoso en Morelia, Mich.) que por que iba a acompañar a quien sabe quién a una de esas reuniones y me dijo:

- Vamos, vamos, acompáñame.- A lo cual respondí con un determinante: No, claro que no. Discúlpame, pero yo no soy creyente y además creo que aborrezco las religiones en su totalidad.

En la siguiente noche…

Mientras yo veía el televisor, me dice:

- ¿Ya te vas a dormir? – ¿No verdad?- ¿Oh si?-
Yo: no se…
El: Bueno, buenas noches, descansa.
Yo: Gracias, igualmente.

Pasaron a lo más unos 4 segundos cuando automáticamente comenzó a sonar el importuno sonido de sus ronquidos (o del tráiler como le quieren llamar).

Yo me dije: Naaa ¿Es broma? Si solo han pasado 4 segundos. Si a mí me cuesta varios minutos conciliar el sueño. Lo está haciendo de broma… Pero… No, si era así.

¿Cómo puede una persona hacer eso? (Lo que él hace).

WTF?

Recuerdan el comercial del niño hiperactivo que brinca y brinca en un colchón normal y aún lado está el colchón de la marca de la cual se promociona dicho comercial… De-repente el niño brinca al colchón de la marca cara y supuestamente buena y…. automáticamente al primer brinco el niño cae rendido de sueño… pues así este ser.

Esa noche aguante unas horas (unas dos) y saque mis cobijas y me largué del cuarto a la sala… prefería dormir en el sofá o donde fuera para no escuchar el tráiler de mi amigo.

Y así sucedió, en la sala… hacía un poco más de frío, pero mucho más confortante no escuchar nada de ruido.

La siguiente noche sería la última, así que platicando con él, me dice:
-¡Ay! Ya mañana es el último día… Gracias a Dios.-

Yo entre mi pensaba... Huta… Por fin….Gracias a Dios dices tú... ja,ja.

Y si esa última noche pensaba que el sería un poco más considerado conmigo y le volví a decir que pues cambiara de cuarto por el de nuestro otro compañero (Noe, el cual estaba exactamente en la misma habitación pero a un lado de la sala) que yo ya había hablado con Noé y este dijo que no había ningún problema en cambiarse.

Y me dijo: No… ¿Yo porque?

Y me dije: WTF? (con qué clase de persona estoy lidiando.)

Así que mejor ya no le dije nada… Solo pensaba en mi mala decisión que había hecho al elegirlo como compañero de cuarto. Eso no se quedaría así… Yo contaría al mundo no su desconsideración para conmigo, sino el impúdico ruido de sus ronquidos que asemejan a un tráiler en decadencia.

Todo esto me traía a mi mente el otro compañero (JUAN PABLO) de días en un dormitorio, de unos días en cuarto y de unos meses en casa que tuve hace tiempo que también era Cristiano y resultó ser pff!… todo un problema., que por su culpa nos cortaron el telecable, casi nos sacan de la casa porque, no tenía sus pagos de la renta a tiempo (siendo que todos ganábamos y cobrábamos el mismo día), no hacia los aseos cuando le tocaban, ponía sus cánticos religiosos a todo volumen, digo… ni yo lo hacía teniendo en mente que tenía el mejor equipo de sonido en la casa, pero que por no fastidiar a mis compañeros, escuchaba mi música en audífonos.

Terminé corriéndolo de la casa… (Así tal cual), pero no solo yo, sino todos (otros dos compañeros con los que vivía y yo) estuvimos de acuerdo y entre los tres le dijimos.

Después algunos otros compañeros de la zona donde laboraba me decían:

-Oye… que lo corriste-
- Yo, si…, si lo corrí y lo volvería hacer de nuevo. Si vivieras con él, créeme que lo harías también tú.-

Volviendo al tema… yo me decía, Pff, pareciera que estos son de la misma tela y fueron contados con la misma tijera (Aún que, supongo que no todos los cristianos son así "ruidosos"¿cierto? ).

La última noche, lo intenté de nuevo, en esa cama suave, y bien tendida... Pero mi compañero de cuarto, comenzó con su resonante orquesta a un clímax exagerado. Esa noche, por momentos paraba, como si la orquesta tuviese algunos descansos y en una de esas se despierta y me dice:

-Héctor... ¿No te he despertado?-

-Yo: Pues ahorita ya estaba tranquilo el asunto, no se escuchaba-

-El: Ah, ok, ok- (Y cayó rendido de nuevo)

Pero minutos más tarde comenzó de nuevo, a lo cual volví agarrar mis cobijas y salí del cuarto.

Al siguiente día bostezaba un poco en el curso y me preguntaban mis compañeros del PIM:

- ¿Tienes sueño?-
- Yo: si… es que hay un tráiler que no me deja dormir… y es mi compañero de cuarto (ja,ja,ja). Parece que tengo el motor en mi oreja.-

Ja,ja,ja. Solo lo veían.

Y a partir de ahí él ha sido bautizado en el sagrado reino de las historias de un químico pagano como: El Trailer (jajaja).

Que va, si René lee esto, joven sea más considerado con los que duermen a su lado. Conmigo no le volverá a pasar, pero...