Canta mi alma, canta para ti…
Perdona que
afinado no pueda estar, ahora que no estas canta con un dolor que ya no se
puede ocultar.
Te conocí de
la mejor manera y te dejé ir de una manera no tan peculiar.
Todo esto
que canto, no sé si tenga algún funcionamiento, pero es todo lo que (ahora) puedo
dar.
Canta mi
alma, canta para ti…
Me aflige y
me perturba la mente la sonrisa marcial que la distancia logró.
Bésame como
la primera vez, aun sabiendo la historia
de locura que este químico pagano imploró.
Llevo en mi
mente resabios y aromas de nuestra
electricidad y sus santiamenes, me
tranquiliza que en algún momento lo recordarás
con agrado, como vilipendio y al final un recuerdo solo será.
Necesito la
cura para seguir la razón y no la belleza que vislumbra su mirar.
Y… sin
embargo sigo deliberando tu imagen.
¿Cuándo te veré…?
Te
encontraré del otro lado, al marchar te alcanzaré para que devuelvas tu mirar.
Me han dicho que cuando muera te podré cantar.
Dame un poco más de tiempo, te contaré la historia sin prisas de mi lamento y de mis pasos al pasar.
HNH OCTUBRE 4 DEL 2012
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